Me gusta cómo corres,
cómo juegas, cómo serpenteas,
cómo vas creando, diminutos
o inmensos, universos helicoidales.
Hay que ver qué alivio me das
cada vez que te recibo
saliendo de un grifo, de un manantial
o de una alcachofa.
Corriente, que no vulgar,
eres libre, agüita hermosa.